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Lecciones en la Plantación de Iglesias: Una Palabra para los Plantadores de Iglesias al Nombrar tu Iglesia

Photo by Jason Betz on Unsplash

Soy un niño de la década de 1980. Recuerdo cuando pensé que nunca usaría pantalones vaqueros de campana. Me burlaba de las fotos de mis padres usándolos e hice un pacto de sangre conmigo mismo de que prefería morir antes que hacer lo mismo.

Tan fuera de onda. Tan anticuado. Muy fuera de moda. No, gracias.

Estaba contento con pantalones vaqueros adornados con puños enrollados que podrían cortar la circulación de un ratón. Estaba a la moda, estaba “in”. Creí conocer la cultura (y la usé bien). Eso fue hasta que pasó una década y luego ¿qué pasó? Me encontré usando pantalones que tendían ensancharse en la parte inferior. ¿Por qué no? Se veían bien con mis chanclas o botas. Técnicamente no eran pantalones acampanados, pero tampoco llevaba pantalones con mangas enrolladas. ¿Qué les pasó? Siguieron el camino de todas las tendencias de moda y fantasía y se reciclaron como trapos de limpieza para automóviles.

Es un testimonio del hecho de que lo que creemos que es genial, provocador y seguro de identificar con la cultura puede algún día hacernos parecer ridículos, anticuados o incluso incomprensibles para la cultura.

Si eres un plantador joven, toma esto en serio cuando consideres nombrar a tu nueva congregación. Lo que crees que es cultural / teológicamente moderno puede ser el equivalente a tener un tatuaje tribal alrededor de tu bíceps, algo de lo que te arrepientes, pero ahora es muy doloroso eliminarlo. No puedo decirles cuántos antiguos plantadores de iglesias han confesado que, en la primera década de siembra, desearon haber nombrado a su congregación algo diferente. Con eso en mente, permítanme dar dos recomendaciones:

Usa la palabra “Iglesia”

¿Qué pasa si eres nuevo en la ciudad y quieres encontrar un buen hospital y un vecino recomendó The Rrhexis Room mientras que el otro vecino dijo St. John’s Hospital. En igualdad de condiciones, ¿hacia cuál te inclinarias? Sé que esto puede sonar casi demasiado rudimentario, pero la mayoría de la gente piensa que una iglesia debería llamarse iglesia.¡Al usar la palabra iglesia simplemente estás aprovechando la lógica de la gente para la misión! Llamarlo otra cosa que no sea una iglesia puede desviar a las personas de entrar en su santuario el domingo para escuchar el evangelio vivificante, cambiante y conmovedor de Dios. Todo porque no se dan cuenta por tu nombre de que en realidad eres una iglesia. Algunos pastores, como parte de su estrategia, no valoran a los invitados que solamente aparecen, ni al servicio del fin de semana como un evento para invitar a personas. Pero para aquellos que lo hacen, tener la palabra iglesia es extremadamente lógico y, en mi opinión, misional.

Tengo MUCHOS amigos pastores que podrían criticarme severamente por lo que estoy diciendo y quizás tengan razón. Tal vez me estoy perdiendo la imagen. Tal vez la necesidad de redefinir la iglesia exige un nombre inusual que generalmente no está asociado con la iglesia. Tal vez eso es exactamente lo que necesitan los no asisten a la  iglesia, porque están resentidos con las iglesias comunes y corrientes. Sin embargo, en mis interacciones personales con amigos que no asisten a la iglesia, me he dado cuenta de que es mejor tener el menor número de obstáculos posibles entre ellos y el evangelio. Por lo tanto, si un nombre es un obstáculo porque es incomprensible, obtuso o completamente extraño, entonces te sugiero que elijas un nombre que aclare, en lugar de desordenar, el camino.

Si eres un plantador joven, toma esto en serio cuando consideres nombrar a tu nueva congregación.

Entonces Joven Plantador, elige un nombre sabiamente. Recuerda que lo que puede ser moderno hoy puede ser inútil para mañana. Es verdad. Un día puedes sentirte tan inteligente porque sabes usar pantalones acampanados, y al día siguiente te sientes tan tonto … porque estas usando pantalones acampanados.

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Lo Claro le gana a lo Sensacional

No importa lo que tu iglesia signifique en latín, griego o hebreo. Si los de afuera no entienden lo que estás diciendo (y supongo que probablemente no estén a la altura de los idiomas antiguos), entonces te arriesgas a crear una puerta de entrada más pequeña para los invitados el domingo. Ahora, admitido, algunos pastores diseñan su nombre para ser algo que los nuevos específicamente no entenderán. Quieren redefinir la iglesia para las personas. Estoy de acuerdo con eso en espíritu. Sin embargo, creo que todavía podría redefinir la iglesia para ellos al enseñarles lo que debería ser la iglesia cuando asisten a una reunión, en lugar de hacerlo inefectivo colocando un nombre que confunde en lugar de aportar claridad. En la tabla de valores de profundidad para el nombre de una iglesia, la claridad le gana a lo sensacional.

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